Seguramente en estos días veremos muchos comentarios acerca de las indicaciones aprobadas en el Senado para que a la hora de las compras públicas, el Estado considere alternativas de software libre o de código abierto. Indicaciones que fueron criticadas por un comunicado de la ACTI.
Una de las defensas de estas indicaciones es el ahorro de licencias de software en el Estado. Si evaluamos el costo de las licencias de software propietario respecto a la disponibilidad de software de código abierto, al menos en números se ve un significativo ahorro. Pero el asunto no es tan simple, es una visión demasiado superficial de costos.
Las licencias de software son sólo una parte del costo, considerando que no existe una solución de código abierto que provea idéntica funcionalidad que una de código propietario y viceversa, no es llegar y reemplazar una solución por otra. No estoy hablando de que una solución sea mejor que otra, simplemente son diferentes, con sus propias ventajas y desventajas hacia ambos lados. Comparar el costo en licencias de software tendría sentido si las soluciones fueran directamente intercambiables, pero no lo son.
Por otra parte, creo que la replica de ACTI fue desproporcionada respecto al ámbito de las indicaciones. ACTI dice que «se dañaría a la Industria local de software ya existente, ya que muchas empresas nacionales, pequeñas, medianas y grandes, licencian comercialmente sus programas computacionales y soluciones». Confieso que puedo estar equivocado, y es probable que ACTI conozca mucho mejor la realidad de la industria local de software, pero sinceramente no puedo pensar en ninguna empresa local que licencie comercialmente software incluido en la adquisición de equipos. Desde un punto de vista muy personal, no me parece que ACTI defiende a la industria nacional, sino que pareciera defender a una empresa norteamericana muy grande, cuyo ingreso principal es en base a licencias de software, si si.. Microsoft.
Luego dice «Este tipo de medidas no ayudan a incentivar la creación de nuevas empresas de software comercial en Chile». En este punto yo creo que confunde software libre con software gratis, si fuera mal pensado diría que quizás esa es la confusión que quiere transmitir. Perfectamente una empresa puede basar su negocio en software de código abierto, ya sea como una solución completa o como parte de ella, lo mismo que hoy en día hace RedHat, Novell, Oracle, IBM, Nokia y que en Chile no hemos sido capaces de imitar. Es por eso que aun no podemos romper la dependencia tecnológica.
Esto de hacer leyes para incentivar el uso del software libre nunca me ha parecido bien, tampoco encuentro bueno que se gaste tanta plata en licencias, pero para que eso cambie no basta con una ley, necesitamos un ecosistema : empresas que puedan dar el servicio de soporte, desarrollo e investigación sobre plataformas libres. Mientras eso no exista, sólo nos quedaremos en los buenos deseos.
¿Cómo aprovechar el software libre entonces? Va mucho más allá de las licencias. Cuando surgen estos temas siempre aparecen las campañas del terror que dicen que la adopción de software libre acabará con la industria del software local, cuando es al revés. La adopción de software libre da oportunidades para que más empresas compitan en igualdad de condiciones. El desarrollo de software no se verá afectado, sólamente se cambiará la forma en que se gastan los recursos. Por ejemplo, en vez de gastar los recursos en distintas soluciones, incompatibles entre si, que nos dejan con ruedas cuadradas, rectangulares y triangulares, se deberían adoptar plataformas de software base estándares que permitan construir soluciones complejas que agreguen valor.
Proyectos financiados por el Estado podrían desarrollarse como software libre, en pro del bien común. Un sencillo ejemplo, en vez de que cada colegio adquiera sus propios sistemas de gestión, lo que hace que cada uno tenga soluciones diferentes, todas con sus propias ventajas y desventajas, por qué no financiar un proyecto para tener un sistema unificado y libre. De esta forma cualquier empresa local podría posteriormente participar en su mantención, desarrollar extensiones, incluso los mismos alumnos o profesores podrían aportar mejoras desde el punto de vista del usuario. ¿Qué se genera? En forma directa obviamente genera una mejora en la gestión de los colegios, con una plataforma estándar estabilizable y mejorable en el largo plazo. En forma indirecta genera nuevos negocios para empresas de desarrollo de software, posibilidad de participación de los alumnos (aprender a trabajar, gana su propio dinero, etc), ahorros por el no desarrollo de múltiples soluciones para un mismo problema, etc.
Quiero terminar mencionando un punto que no está relacionado con la polémica actual, pero es algo que seguramente ACTI nunca declarará. El software libre ha permitido que la industria de desarrollo de software pueda reducir sus costos en la integración de tecnología. Hoy podemos desarrollar soluciones de alta complejidad, gracias a que los componentes esenciales están disponibles como software libre. Si no fuera por esto, estaríamos bastante atrasados respecto al tipo de problemas que hoy podemos resolver, aún estaríamos en el arado y no conoceríamos el tractor.
octubre 14th, 2013 at 17:13
n chile se usan tales poryectos libres y lo estan usando tantas empresas
octubre 3rd, 2013 at 02:43
Otra pregunta de ignorante. En software comercial las municipalidades usan Autocad, ¿En linux qué alternativa equivalente hay? (sin considerar CrossOver o equivalentes).
octubre 3rd, 2013 at 02:40
Lo del alaraqueo lo dejé plasmado en mi primer post (creo) nice nice 😀
agosto 24th, 2013 at 14:41
En todo caso me da paja siquiera buscar, hay alguien interesante en la ACTI? es decir, alguien que valga la pena rescatar?
mayo 28th, 2009 at 13:38
La verdad no se necesita una ley, el open source es una realidad, como en todo el mundo, la mayoría delos servidores web de Chile son algún sabor de Linux con Apache y sus variantes (ambos open source), cada día que pasa más gente usa OpenOffice como alternativa al software propietario, yo acabo de instalarlo en 400 PC`s de una empresa, cada día que pasa mas gente esta usando SugarCRM, por ejemplo, o el ERP Compiere y sus Forks Adempiere, OpenBravo y otros, uno de los software mas usados para administrar tarjetas de crédito esta hecho por una empresa chilena que solo usa open source . Así que para allá va la micro, de hecho la micro ya ha dado varias vueltas. En mi opinión, las leyes solo trancan la pelota y que el estado compre o no open source da lo mismo, pagan mal y se demoran una enormidad en pagar, así que mejor que se queden con los microsoft, los SAP y paguen las ganas. Ya se subiran al tren, obviamente, tarde.